CUBILLAS DE ARBAS

 
Cubillas de Arbas

Datos básicos

Altitud: 1.340 m.
Distancia al Ayuntamiento: 15 Km.
Fiesta: 31 de agosto (San Ramón)

Etimología

El nombre de Cubillas (En León son abundantes, como Cubillas de Rueda, Cubillas de los Oteros, o Cubillos del Sil)… tiene su origen probable en varios vocablos latinos:

'covus'= hueco, cóncavo.
'cupa' = hondonada.
'cubile' = ´cubil´, majada, lugar donde duerme el ganado.

Todas estas acepciones convienen al pueblo de Cubillas de Arbas, como lugar emplazado en una hondonada del terreno, en la fosa tectónica del valle de Casares, tributario del Bernesga, aguas abajo del Embalse. Lo rodean míticos picachos: ´Meloita´, la ´Peña Barragana´, ´La Brazosa´ o el ´Chas´…


Historia y legendaria. Actualidad

Espléndido aislamiento el de este pueblo singular, que forjado a sí mismo durante siglos, se caracteriza por una percepción aristocrática de su vecindario, independiente, altivo, que tiene confianza en sus propias fuerzas y pone iniciativa donde otros esperarían las ayudas externas. Así acometen tareas como restaurar su Lechería, montar un Centro Juvenil en la antigua escuela, cuidar el ganado en ´vecera´ o impulsar un grupo de jóvenes con trajes tradicionales de fiesta… Toda una panoplia de actividades asociativas y comunales

Además de los topónimos ya señalados, merecen citarse otros de carácter histórico y descriptivo, pues aportan señales inequívocas de realidades pasadas en el término del pueblo: Así ´El Calero´´El Castro´ (sin vestigios castreños), ´El Castillo´ (sin vestigios de edificación), ´La Ermita´ donde se ubicó la de ´Montosa´ o ´La Braña´.

Como señal de aviso de la toponimia, está certificado que en el paraje de ´La Ermita´ existió un poblado llamado ´Montosa´, con su ermita de San Miguel. Así consta en el Libro de Fábrica de la iglesia de Cubillas de Arbas, depositado en el Archivo Histórico Diocesano, en anotaciones de los años 1.750 y 1.761. Se dice en esta última que 'se ha demolido la antigua ermita y parroquial del glorioso San Miguel de Montosa, con la precisa condición y obligación de edificarla nueva en este lugar'.
Cumpliendo esta obligación, la piedra de la actual iglesia de Cubillas e incluso la pila bautismal proceden de esta ermita de Montosa. Los ´mayordomos´, siguiendo costumbre inmemorial, son los mozos del pueblo.

Cubillas de Arbas tiene datos geográficos e históricos particulares para completar un volumen. Hasta bien entrado el siglo XX utilizaba la salida natural hacia San Pedro de Luna, a través del túnel que comunica con Aralla. También hacia Busdongo, por senderos de montaña, que evitaban el gran rodeo hacia la zona de Villamanín. Montes míticos, cargados de leyenda, rodean y protegen el poblado, como la ´Peña Barragana´, donde se dice que quedó petrificada en la roca, la figura de una mujer, o la ´Peña Meloita´, por donde llegan las tormentas, según el dicho:

'Cuando la Peña Meloita pone la toca
no tiendas la era, moza'.

De la leyenda de ´La Barragana´, como la del envenenamiento con el pan de la caridad, nos haremos eco en otro lugar.

El pueblo se organiza en seis barrios, aunque parezca excesivo para tan breve vecindario: La Villa, Barrio del Río, Lucero, Triana, El Campar y La Calzada.

De la historia de Cubillas, ligada a Arbas, restan reminiscencias antiguas: Así la obligación de 'ir a ofrecer', a la Colegiata, el día 8 de septiembre, impuesta por un abad, en castigo a una mujer de Cubillas por casarse con un forastero. La oferta, religiosamente cumplida hasta la actualidad, consiste en el obsequio de patatas, miel, flores, rosquillas,… que llevan las jóvenes del pueblo, ataviadas con su traje de fiesta.

En una fachada se encuentra empotrada una piedra tallada, representando una Cruz de los Ángeles, emblema del obispado de Oviedo. (Tallas como ésta se observan en diversos edificios de la zona, como en la Casa Conventual de Viadangos, pues no hay que olvidar que los pueblos de Arbas pertenecieron a la diócesis de Oviedo hasta el reciente Concordato de España con la Santa Sede, de 1.953).

La iglesia, ya citada, contiene cuatro tallas de madera de inusual valor: Un San Mamés, pastor de ovejas, en el retablo principal; un San Ramón Nonato; un San Miguel y un Salvador, del siglo XVII. Es bien sabido que las iglesias de esta zona son los únicos reductos del patrimonio artístico.



Últimamente se ha impuesto en Cubillas la práctica de la escalada. Comenzó poco a poco en el pico del ´Prido´, pero se extendió luego al ´Prao la Segada´, al ´Chas´ y a la ´Brazosa´. Los escaladores han abierto ya multitud de Vías de acceso a estas míticas montañas, cuyos ´libros de rutas´, con sus dibujos e instrucciones, se encuentran en el propio pueblo de Cubillas, en la casa de Nélida Carro, a disposición de los escaladores..

Como nuevos reclamos al turismo activo, se abrió al público el Centro de Turismo Rural ´Río Viejo´. Hermoso establecimiento con espléndida cocina de la zona, que tiene acceso virtual en: www.rio-viejo.com

Para completar esta breve radiografía diremos que Cubillas también sufrió la fiebre minera: En la zona de ´La Brazosa´ se explotó cobre y cobalto. En el ´Tuñón´ se explotó barita.

Una increíble riqueza de folklore aletea aún entre las callejas del pueblo: Se conserva el ´Ramo´ de Nochebuena original, la tradición de los ´Zafarrones´, con variantes de mucho interés sobre los tradicionales de Rodiezmo, los originalísimos ´panderos´ de Cubillas, con los cuales ganaron el primer premio de Baile en el Palacio de los Deportes de León, hace ya casi treinta años… y un amplio rastro de juegos tradicionales, bailes, rondas, romances...

Este espacio no nos permite más detalles. Es necesario ir a Cubillas, dejarse acompañar por sus gentes entrañables. Atender y soñar.